Este domingo 21 de junio vuelve a la pantalla de HBO la serie dramática True Detective, a las 22.00 hrs de Argentina, y simultáneamente con Estados Unidos. Tuve la oportunidad de ver los primeros 3 episodios en una proyección cerrada para la prensa y… wow.

La segunda temporada de True Detective es totalmente independiente de la primera. Nuevo lugar, nuevo caso, nuevos detectives, ningún tipo de relación con la historia anterior. Ahora encabezada por Colin Farrell, Vince Vaughn, Rachel McAdams y Taylor Kitsch, nos plantea una trama más mafiosa, pero tan cruda, dramática y misteriosa como es la costumbre de la serie.

Esta nueva temporada involucra a más personajes principales, y sigue a tres policías y un criminal, quienes deben indagar en una red de conspiración en torno a un asesinato. Colin Farrell es Ray Velcoro, un detective corrompido cuya lealtad esta dividida entre sus dos jefes: el departamento de policía corrupto y un mafioso al que le debe. Por su parte, Vince Vaughn interpreta a Frank Semyon, un criminal en peligro de perder su imperio cuando sus intenciones de entrar en un negocio legítimo se ve afectado por el asesinato de su socio.

Rachel McAdams encarna a Ani Bezzerides, una detective del sheriff del Condado de Ventura cuya ética inflexible la pone en desacuerdo con mucha gente y con el sistema para el cual trabaja; y Taylor Kitsch es Paul Woodrugh, un veterano de la guerra, ahora oficial de la Policía de Caminos de California quien huye de un pasado difícil y de un repentino escándalo que nunca sucedió.

Para terminar de condimentar este elenco, Kelly Reilly interpreta a Jordan, una ex-actriz y esposa de Frank Semyon quien es socia en los negocios de su esposo y comparte las mismas ambiciones.

Con una secuencia de apertura de lo más perturbadora, crímenes morbosos, historias de abusos sexuales y protagonistas en un camino de auto-destrucción, la segunda temporada de True Detective conserva el espíritu de su antecesora, pero al involucrar más protagonistas espero que nos ofrezca todavía más diversidad y riqueza de historias.

True Detective es un drama. Un dramón. No es tu típica historia policial o de detectives. Si bien hay un caso que resolver, la historia se centra en las vidas de sus protagonistas y sus muchísimas imperfecciones y errores.

No apta para el que quiera pasar un rato divertido o que no tenga ganas de hacerse planteos existenciales durante un rato (¡no los juzgo! todos necesitamos eso a veces), pero sumamente recomendada para el que tenga ganas de ver televisión de calidad, que no subestime a su audiencia, y que le guste que no siempre le den la trama servida en bandeja, sino que tenga que atar cabos dentro de su propia cabeza.

Cada uno de los tres capítulos que vi fue complejo en sí mismo y hay muchísima información para procesar. Y creo que por eso es una de esas series que quizás se entienda más viendo de a varios capítulos por vez.

Por lo pronto, el estreno es este domingo a las 22 horas por HBO.

¡Después cuéntenme qué les pareció!