¿Alguna vez te preguntarse cuáles son las condiciones que aceptás antes de comenzar a usar un servicio web que tan felizmente las empresas te brindan gratuitamente (o no tanto)? ¿Alguna vez te pusiste a reflexionar exactamente qué derechos les estás cediendo o cómo manejan tu información privada?
Quizás si, pero lo más probable es que al minuto de hacerte esa pregunta te hayas cansado de leer los interminables «Términos y Condiciones» de la web en cuestión y hayas aceptado ciegamente sin leer en profundidad o perdiéndote en los términos legales y técnicos. Ya lo dice una frase célebre en internet: «Las dos mentiras más grandes de la web son ‘Soy mayor de 18 años’ y ‘He leído y acepto los términos y condiciones’«.
TOS;DR es una web que te ayuda a superar ese mal momento y a estar más informado sobre que cosas aceptamos cuando le hacemos click a ese pequeño cuadradito obligatorio que se entromete con nuestras ganas de usar el servicio en cuestión.
El término TOS;DR significa de «Terms of service; didn’t read«, que a su vez viene de otra frase célebre de internet: TLDR (too long didn’t read), que básicamente significa que lo posteado es muy largo y nos dio mucha pereza leerlo. Lo mismo nos pasa con los términos y condiciones y los creadores de está página lo saben muy bien, por lo que crearon una versión resumida y sencilla de leer de los TyC de las páginas más conocidas, para estar así al tanto de que información estamos cediendo y como va a ser utilizada.
Tienen un interesante sistema de clasificación de cada sitio, que va desde Clase A, que significa que el servicio en cuestión es muy respetuoso de tu privacidad, hasta la Clase E, donde hay cláusulas bastante abusivas que en general, no conocemos antes de aceptarlas.
Además del servicio a través de la web, TOS;DR brinda add-ons para diversos navegadores, lo que hace aún más fácil su utilización
Navegando por la página me encontré unas cuantas sorpresas, como la cantidad de páginas en las que, una vez registrado, no tenés derecho a eliminar tus datos. Es una web interesante y que intenta resolver un tema que viene desde los inicios de la internet: En la vida real pocas veces firmaríamos algo sin leer lo que firmamos, mientras que en la web, ni nos molestamos en leer en qué nos estamos metiendo.
Da para reflexionar y -aunque sigamos usando los servicios en cuestión- siempre es bueno estar informado para poder tomar decisiones más concientes sobre lo que subimos a cada una de las páginas que utilizamos diariamente.
Vía: Omicrono
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