Revisando mis feeds el fin de semana, me topé con un artículo en el blog de Intercom, en el cual analizan la -no tan- reciente moda de utilizar el formato de tarjetas a lo largo de cualquier producto web, redes sociales, apps, blogs, lo que se les ocurra.
Es interesante como apuntan a una re-estructuración de la web, que busca brindarle al usuario una experiencia de uso única, hecha a su medida; basándose en factores como los patrones de consumo de contenido, sus intereses, preferencias, gustos, comportamientos, ubicación, así como también los intereses y comportamientos de sus amigos.
Twitter implementó sus Cards, permitiendo mostrar contenido multimedia en los tweets, lo que lleva a completar la experiencia del usuario en la red social. Ya dejó de ser simplemente un sitio en el que comentabas qué estabas comiendo o que te daba fiaca hacer el trabajo práctico de la universidad, pasó a ser un lugar donde la gente debate, comparte información y se nutre de opiniones y puntos de vista, entre otras cosas.
Como otros claros ejemplos los tenemos a Google y a Pinterest. Google lanzó, junto a Android 4.0, Google Now, el centro de notificaciones de eventos (lease: vuelos, clima, agenda/calendario, recomendaciones por geolocalización, etc) que basa su interfaz en tarjetas. Pinterest, por su parte, fue el que inicio la revolución en los sitios, desde blogs hasta medios, utilizan el formato de tarjetas para su contenido.
Lo importante del concepto de las tarjetas es que sirve. Es útil. Logra seccionar la información, da un aspecto de pulcritud al contenido y ordena al usuario en la lectura que tiene del mismo. Parte de esto es debido a su alto grado de adaptabilidad o versatilidad, que permite a los diseñadores y programadores apuntar a varios medios de consumo, no importa el tamaño de tu pantalla, la experiencia será prácticamente la misma. Por más que a muchos les pese el responsive design.
Es interesante analizar cómo un formato se va difundiendo, hasta el punto de que llegamos a verlo hasta en la sopa. El tema es cómo las empresas lo utilizan acorde a sus necesidades y no por pura moda para estar “actualizados”, porque entonces logran el efecto contrario, perjudicando al consumidor del contenido.
Les recomiendo la lectura del artículo si quieren adentrarse en otros fundamentos relativos a estos conceptos.
Ustedes por su parte qué opinan del formato de tarjetas a lo largo de la web? Creen que durará, o es sólo una moda pasajera?
Deja una respuesta