Justo antes de graduarse de la escuela de cine, Mirjam Veske y Nils Eilif Bremdal, dos estudiantes noruegos le dieron vida a Kosmonauta. Un impresionante corto de ciencia ficción del que, si no fuera porque sabemos su origen, no nos sería difícil imaginar que se trata de una superproducción digna de Hollywood capaz incluso de opacar a Gravity.
A estas alturas seguramente habrán visto o sabrán de la existencia de Gravity, película dirigida por Alfonso Cuarón, que fuera un éxito de taquilla en 2013 y cuyos efectos visuales dejaron con la boca abierta a más de uno.
Pues bien, Kosmonauta logra impresionar prácticamente al mismo nivel que el largometraje de Cuarón sin un gran presupuesto por detrás. Ese es uno de los aspectos que sorprende. Y como si fuera poco, este corto tiene una historia muy interesante de fondo.
En 1961, Giovanni y Achille Judica-Cordiglia, dos hermanos italianos captaron lo que en apariencia era la señal de auxilio de una cosmonauta soviética. Y aquí es cuando todo comienza a tomar tintes de teoría conspirativa: la Unión Soviética jamás reconoció que un vuelo espacial se haya llevado a cabo en ese momento, ni la desaparición de ninguno de sus cosmonautas.
Precisamente, Veske y Bremdal tomaron ese mismo audio y lo utilizaron para darle vida a la historia de este corto. Veremos una representación del instante en que los hermanos Judica-Cordiglia interceptan el pedido de auxilio de la cosmonauta. Desde el diseño de arte, pasando por la dirección de fotografía, hasta los efectos especiales, el resultado es asombroso.
Vía | Movie Pilot
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