La semana pasada me encontré con este video de Derek Sivers que me pareció importante compartir con ustedes. Y es que después de pasar tantas horas detrás de un monitor y con las manos en el teclado, no es raro que uno empiece a olvidarse que las personas que hay detrás de un blog, de una nota, de una fanpage o un perfil de Twitter son, en realidad, seres humanos. Personas de carne y hueso, bastante como vos y como yo.
¡Ay, Cecilia, qué obviedad! los oigo pensar, y no los culpo del todo. Pero también piensen en cuántas veces vemos (o peor, emitimos) comentarios que no tienen ningún tipo de respeto por la persona que los va a leer, como si un blog se escribiese solo, o si a las marcas online las manejasen robots sin sentimientos.
Un pequeño llamado de atención para terminar la semana, que nos invita a frenar dos segundos antes de mandar el próximo comentario enojado y pensar «¿le diríamos esto en la cara a una persona?». Porque, finalmente, eso es lo que estaremos haciendo.
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