El día de ayer, gracias a un tweet de Pablo Mancini nos enterábamos de un nuevo plan del Gobierno Nacional Argentino: Program.ar. La iniciativa tiene por fin desarrollar la enseñanza en el ámbito de las ciencias de la computación, fundamentalmente con miras a que los jóvenes exploten su potencial mediante el uso de una computadora.
El objetivo del plan Program.ar es:
profundizar en el conocimiento y la enseñanza de las ciencias de la computación, a fin de que estén presentes en la formación de nuestra cultura general. Este objetivo se apoya en la idea de que es de esta manera como se conformarán usuarios críticos de tecnología y de que solo comprendiéndola cabalmente se podrá dejar de ser meros consumidores para agregar valor en los desarrollos y en el uso cotidiano que de ella se hace.
Hay varios puntos sobre este nuevo proyecto que me llamaron la atención y que desarrollo a continuación. Empecemos por las zonas grises.
Me sorprendió la falta de difusión en su día de lanzamiento. Entiendo que la noticia haya salido casi a las 21pm y que las redacciones de los diarios están cerradas, pero con lo característico que es este gobierno de hacer un gran alarde de cada paso que da y de darse palmaditas en la espalda a cada rato, me resultó curioso que si quería informarme más para conocer el plan, tenía que ir y buscar específicamente sobre el tema en sites gubernamentales (Télam, Educ.ar y Ministerio de Ciencias, Tecnología e Innovación Productiva).
La falta de un plan de acción, o mejor dicho, su desconocimiento público. Lamentablemente, el gobierno nacional no se caracteriza por tener en mira la transparencia sobre lo que sucede tras bambalinas (Algo que sí está aprendiendo a hacer la administración de CABA), por lo que al entrar al sitio del plan program.ar me topé simplemente con un video de YouTube que explica la importancia de aprender a programar en una sociedad que necesita y vive de la tecnología.
Bien, pero, ¿en dónde puedo conocer el cómo de este plan? ¿Cómo se va a llevar a cabo? ¿Quiénes son los profesionales que están a cargo del proyecto? ¿Cuáles son los pasos que van a tomar mes tras mes, año tras año, para alcanzar la meta que propone el proyecto? ¿Cuál es el ámbito de aplicación? ¿Aplica solo para niños del primario, del secundario o ambos? ¿El plan se impartirá en escuelas o a través de eventos públicos de libre asistencia? Estas son tan solo algunas preguntas rápidas que me surgen, y que son respondidas vagamente, espero que a lo largo del desarrollo de Program.ar podamos tener las respuestas.
Más allá de las zonas grises, creo que el plan Program.ar es una iniciativa excelente, pero sobre todo necesaria. Vivimos en la era de la información, prácticamente conectados todo el día a Internet, es fundamental que las nuevas generaciones puedan explotar su potencial con miras en el desarrollo tecnológico, sobre todo cuando cada vez se necesitan más y más profesionales en este ámbito, y cuando en las escuelas (no solo públicas, sino privadas) se sigue enseñando tan solo a usar Word, Excel y PowerPoint, y si tienen suerte, Visual Basic.
Como mencionan en el sitio educ.ar, como parte del plan se van a realizar a siete foros regionales en distintos puntos del país a lo largo de este año, donde «se va a discutir abiertamente la importancia de que los jóvenes se acerquen al pensamiento computacional, las estrategias didácticas adecuadas y los momentos y contextos para hacerlo», también se planea hacer una maratón de programación (mejor conocidas como hackathons) para realizar aplicaciones orientadas a la educación, además de talleres de realización de videojuegos, robótica y animación 3D.
Este nuevo plan debería ser la razón de ser de Conectar Igualdad (el plan gubernamental para entregar netbooks a estudiantes del primario), para lograr apasionar a los chicos, enseñarles a aprovechar la tecnología y que le den un uso adecuado a sus computadoras, y no que las terminen vendiendo por MercadoLibre, las permuten por partes para una moto o se la pasen jugando al Counter-Strike en clase o a la salida del colegio.
Ya vimos que el impacto de proyectos como Codecademy o Code.org son realmente importantes, han marcado un antes y un después. Obviamente no se puede pretender que todo niño salga apasionado por la computación o la programación, pero definitivamente ese niño no va a ser el mismo luego de aprender a pensar, a encontrar soluciones y resolver problemáticas.
Por su parte, ¿Qué opinan? ¿Creen que puede ser útil la manera en la que se llevaría a cabo este proyecto?
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